Me gustaría anotar que perfilar la impresora no es un proceso especialmente complejo con un ColorMunki Photo. Pero también me gustaría hacer patente que todo este proceso será una auténtica pérdida de tiempo si el objetivo es un equipo de calidad discutible. Esto es, que por mucho que tu impresora ponga que es fotográfica, pero cueste 50 € en el Carrefour o el Eroski, pues, lo único que harás es perder varias horas de tu valioso tiempo y eso sin contar con el precio del ColorMunki, que barato precisamente no es.
Quiero que esto quede claro. Esto sirve con los nuevos equipos de impresión fotográfica ink-jet que llegan al mercado con un objetivo claro y que es un usuario doméstico avanzado que cuenta con inquietudes en el aspecto técnico de reproducción de color. Son impresoras con cartuchos de color separados, normalmente de tintas pigmentadas, resoluciones bastante altas y con un mínimo de seis colores, generalmente dos negros, un gris y los normales cyan, magenta y amarillo. Lo ideal es que cuenten también con un light cyan y un light magenta, con lo cual ya estaría muy cercano al espacio de color Adobe RGB. Si además de estos colores, llegan a incluir un naranja y un verde, ya estaremos ante equipos semi-profesionales con precios a partir de unos 500 € en tamaños A3, que se pueden destinar perfectamente a la impresión de pruebas de color para imprentas mediante RIP.
El espectrofotómetro con el que lograremos hacer todo esto es el ColorMunki, que sería la gama de entrada a este mundo del color que a mí tanto me apasiona, pero que a muchas personas se les hace, tal vez, algo cuesta arriba. Es el equipo más económico que tenemos ahora mismo en el mercado. Bueno, al tema.
No sé si lo habré explicado antes, pero perfilar tu impresora debería ser el tercer paso en tu proceso de gestión de color avanzado. El primer paso sería calibrar tu monitor, y aquí no entraré en calidades medias de monitores porque daría para otro artículo completo o incluso un libro como los de Hugo Rodríguez. Supongo que ya tienes el monitor calibrado. Lo bueno de todo esto es que puedes hacerlo con el mismo instrumento, que en este caso es un espectrofotómetro y es más versátil que un colorímetro. ¿Lo recomiendo así? No. Si somos puristas, lo ideal es calibrar la pantalla con un colorímetro triestímulo, como el X-Rite i1Display PRO y el software libre ArgyllCMS. Pero sigamos. Poder se puede. Y te quedará bien Dejamos lo de hilar fino para otros niveles.
El segundo paso sería perfilar tu cámara con una carta de color. Una carta de color es una tarjeta de tamaño variable con unos parches de color con unos valores determinados que le informarán a tu software de trabajo, CameraRaw, Capture One o Adobe Lightroom, si sufre desviaciones de color. Mientra mejor sea la cámara y sobre todo, la iluminación, menos corrección realizará.
Estos dos pasos como es evidente no son obligatorios, pero sí indispensables para que tus fotografías impresas sean lo más realistas posibles. No tendría ningún sentido perfilar una impresora y no controlar el color en la toma y el revelado digital posterior.
Perfilar la impresora es tan sencillo como abrir el programa del ColorMunki y seguir los pasos. Son muy sencillos y debo de admitir que han simplificado bastante la operación. No podemos esperar un gran control del proceso. Por lo tanto, si eres un usuario muy avanzado este no es tu software y se te quedará corto, pero para un resultado bastante bueno es suficiente. Yo siempre soy partidario de ajustar la dificultad de los procesos a lo que necesita el usuario y no tendría sentido complicar esto en exceso.
El comienzo de todo esto no tiene mayor misterio. Quiero puntualizar que la perfilación que realizará, se hará sobre un papel determinado y un juego de tintas concreto. Por eso te pedirá escribir el nombre del perfil. Cuando vuelvas a usar ese tipo de papel, usarás el perfil ICC que el ColorMunki te haya generado. Cada papel, un perfil. Sencillo. Usar este perfil será sencillo desde, por ejemplo, Photoshop, pero estará instalado en tu sistema operativo y podrás usarlo desde cualquier programa compatible con esta gestión.Si posteriormente al perfilado cambias de marca de tinta, pasas de las originales a las compatibles, no te servirá de nada. Puedes perfilar la impresora con tintas compatibles, claro, nada te lo impide. De hecho yo lo hice así pare ver la diferencia de color. Y sí, la hay.
¿Son peores las tintas compatibles respecto a las originales? No, para nada. Son diferentes. En mi caso detecté diferencias en algunos tonos rojos, y no entro en la integridad de los colores con el paso del tiempo. Las tintas inkjet con base acuosa no son precisamente la fórmula de la coca-cola. De hecho son una evolución de la tinta de estilográfica que antiguamente uno se fabricaba en casa con agua destilada y polvos de venta en comercios. Se elaboran a partir de colorantes precipitados, agua y algún tipo de fijador, pero poco más. Otro cantar son las tintas pigmentadas, que llevan más desarrollo y son las más duraderas, y caras. No me extenderé más en este punto.
El programa te hará imprimir una serie de parches de color en un tamaño DINA4 sobre los cuales posteriormente medirás con el espectrofotómetro. Esto supondrá un problema si quieres perfilar un papel con un tamaño más pequeño. Por ejemplo los paquetes de papel fotográfico que ya vienen a tamaño de fotografía estándar, como los 10×15 o los 13×18.
Tras la medición de estos parches, ColorMunki Photo generará otra serie de parches para mejorar el perfilado.
E incluso si después quieres mejorarlo, podrás generar una tercera tanda de parches (llegarías a los 150 en total) para afinar la calibración de color. En entornos profesionales muy avanzados esta cantidad de parches nos parecería algo escaso, porque se llegan a perfilar plotter hasta con mil parches. Vuelvo a repetir que esto es un software sencillo para no liarse y es más que suficiente. De todas formas, nada te impide posteriormente mejorar el perfil con 50, 100 o 150 parches más. Conseguirás afinar bastante el color.
Resultados: Yo lo he probado y funciona. Al principio era algo escéptico, porque estoy acostumbrado a trabajar con equipos que triplican en precio y prestaciones a este ColorMunki Photo, pero tras haber realizado la perfilación de tres tipos de papel, con dos tintas diferentes, he llegado a la conclusión de que es un software más que suficiente para la mayoría de usuarios. Y entiendo que en este nivel ya son algo avanzados y que realmente quieren que los colores de sus fotos mejoren y lo harán, mucho. Es, por lo tanto, una compra recomendable. No existen muchas alternativas tampoco en el mercado.
Quiero agradecer a Didecaf la cesión temporal de este equipo ColorMunki Photo para la realización de este artículo y a su técnico Íñigo Haggemann por las explicaciones recibidas sobre diferentes aspectos de uso.
Hola, estupendo informe. Gracias.
Se podría usar también el idisplay pro de x-ray?
Hola, Javier. No, lo siento. El i1 Display Pro es un colorímetro y no un espectrofotómetro. Es decir, trabaja con luz emitida, en este caso del monitor, RGB, y lee los parches. El espectrofotómetro emite un haz de luz normalizada, en ángulo y temperatura, que al rebotar, le entrega información al sensor. Son dos máquinas totalmente diferentes.